Enviado por David_GM el Jue, 07/11/2024 - 10:24 Enlace permanente
Libertad de elección REAL, por favor
Buenas.
La imposición de cualquier cosa es, en general, un error. Más aún cuando afecta a cuestiones tan elementales como la educación y la conciliación familiar. Yo estoy en contra de la jornada partida, por motivos ya ampliamente comentados en este foro, pero estoy aún más en contra de los argumentos falaces que se utilizan para fomentarla, y el colmo de la sinrazón es que se pretenda no ya fomentar, sino imponer. Entrando en detalles:
1.- Los supuestos estudios científicos que avalan la jornada partida en términos de rendimiento escolar no tienen un pase si se leen con un poco de rigor estadístico. Si no todos, me he leído la gran mayoría, y como matemático y estadístico me provoca vergüenza ajena que se utilicen casi como dogma de fe.
2.- Que haya familias que aún no se hayan dado cuenta de que los horarios de salida con comedor, y por tanto las posibilidades de conciliación, son los mismos en jornada partida que en jornada continua se puede entender. Lo que no se puede entender es que desde la consejería se utilice el argumento de la conciliación para posicionarse a favor de la partida, siendo, como es, falaz y tan fácilmente desmontable.
3.- También es comprensible que haya padres preocupados porque su situación personal no les permite estar en casa para la vuelta de sus hijos alumnos de ESO, y éstos tengan, con 12 años, que comer y pasar unas horas solos en casa. En ese sentido la conversión de CEIPs a CEIPSOs es justificable. Pero no la obligatoriedad de jornada partida para sus alumnos de ESO. Los CEIPs que se conviertan en CEIPSOs aumentarían los horarios de comedor y la cartera de extraescolares para incluir a los nuevos alumnos, de forma que, aún con jornada continua, éstos podrían permanecer en el colegio las mismas horas que si tuvieran jornada partida.
4.- En primaria los niños tienen 5 sesiones lectivas de 45 minutos y salen a las 16:00 en jornada partida. ¿A qué hora se pretende que salgan los alumnos de ESO, que tienen, en el mejor de los casos, tres días a la semana 6 sesiones y dos días 7 sesiones, todas de 55 minutos? ¿Dónde queda la conciliación de los propios alumnos, dónde sus horas de descanso?
5.- Si de verdad se tiene vocación de fomentar la libertad de elección debe cambiarse la normativa que regula el cambio de jornada para que sea más flexible y permita expresar verdaderamente la voluntad de las familias. Me parece justo mantener la condición de 2/3 de votos emitidos a favor del cambio para que éste se apruebe, al fin y al cabo es una medida de calado y requiere de un consenso mayoritario. Lo que debe eliminarse es la condición de participación de 2/3 del censo para que el resultado sea tenido en cuenta. Esta medida favorece a las familias que no quieren el cambio, puesto que en lugar de votar se quedan en casa para que haya una participación baja, y esta estrategia se promueve activamente por parte de los partidarios de mantener el horario que se tenga. Si se elimina esa condición se tendrá un recuento mucho más real y representativo, puesto que todo el que tenga una opinión votará, y paradójicamente, se alcanzarían participaciones superiores a esos 2/3 eliminando su obligatoriedad. Si es cierto que hay tantas familias en colegios con jornada continua que quieren el cambio a partida, ésta es la forma de lograrlo, ésta es la verdadera libertad de elección, la basada en la participación y la democracia. No la imposición.
Por tanto, les ruego que recapaciten con el tema de la jornada, por favor, que escuchen a los expertos (a los de verdad), a las familias y a la comunidad educativa en general, que no actúen por imposición y que cambien esa normativa que impide la expresión real de la voluntad de las familias.
Saludos,
David