Enviado por ANDEMA el Jue, 26/12/2024 - 12:25 Enlace permanente
Observaciones de ANDEMA al Anteproyecto
Observaciones de ANDEMA al Anteproyecto de ley de protección de los consumidores de la Comunidad de Madrid.
La Asociación Nacional para la Defensa de la Marca (en adelante, ANDEMA) agradece la apertura de la consulta pública para el Anteproyecto de ley de protección de los consumidores de la Comunidad de Madrid.
Esta Asociación quiere reconocer la voluntad de la Comunidad de Madrid de Madrid en proteger al consumidor, y solicitamos adaptar su legislación autonómica para prohibir la venta ambulante no autorizada de productos ilícitos y dar protección a los titulares de derechos de propiedad industrial e intelectual (en adelante, PI), frente a la venta de falsificaciones en establecimientos comerciales.
El comercio ambulante no autorizado de productos infractores de PI sigue arraigado en muchas de las ciudades de la Comunidad de Madrid, dando una imagen lamentable a los turistas que vistan la región cada año.
Nuestro tejido comercial, que ya sufre los efectos de la bajada del consumo interno, tiene, asimismo, que soportar la competencia desleal que supone la venta ilegal de productos infractores de la PI, y de falsificaciones, que reproducen los productos auténticos que están protegidos por marcas y diseños registrados, sin contar con licencias, sin pagar impuestos ni Seguridad Social, detrayendo riqueza y poniendo en riesgo puestos de trabajo y haciendo que la economía sumergida y el crimen ocupen nuestros municipios.
Según datos ofrecidos por la Confederación Española de Comercio, se cifra en 100.000 los comercios que, en España, pueden cerrar en los próximos años, única y exclusivamente, por culpa de las falsificaciones, debido al comercio anticompetitivo y desleal que se realiza por vendedores de productos infractores. Muchos de esos comercios que cerrarán, están en la región de Madrid y ello supondrá más desempleo, menos personas que cotizan a la Seguridad Social, menor recaudación de tasas, etc.
Además, esta labor no solo protege a las marcas, sino que tiene un impacto directo en la vida de los ciudadanos: las marcas son sinónimo de confianza, seguridad y calidad. Protegerlas es, también, garantizar el bienestar de los consumidores frente a los riesgos asociados a las falsificaciones, como delitos contra la salud pública, la seguridad vial o la economía.
Las ciudades son una pieza clave en la lucha contra la venta de falsificaciones. Son el marco en el que se desarrolla el comercio y, por ello, es necesaria la protección del mismo a nivel local y regional con la aplicación de leyes y la colaboración entre el sector público y titulares de las marcas para crear un entorno favorable a la concienciación del consumidor sobre los perjuicios del consumo de falsificaciones y acciones para combatir su distribución y venta.
Es por ello que consideramos oportuno aprovechar la consulta pública del el Anteproyecto de ley de protección de los consumidores de la Comunidad de Madrid, para que se regule la prohibición y sanción, desde un punto de vista administrativo, de la venta ilícita de falsificaciones en la región.
OBSERVACIONES Y PROPUESTAS:
VENTA AMBULANTE NO AUTORIZADA Y EN ESTABLECIMIENTO
El Anteproyecto de ley de protección de los consumidores de la Comunidad de Madrid, deberá regular la prohibición de la venta ambulante y en establecimiento de productos falsificados, que suponen una infracción de derechos de PI y otros que puedan atentar contra la seguridad personal y la salud de los consumidores, tanto si dicha venta se produce en un establecimiento legal como en una venta ambulante autorizada o sin las preceptivas licencias.
Por otra parte, consideramos la necesidad de establecer e introducir una disposición que venga a prohibir la adquisición o compra de los productos a los que se hace referencia en este apartado.
Desde ANDEMA entendemos que el negocio ilícito de las falsificaciones tiene una oferta amplia, porque la demanda es elevada. En otras palabras, la persona que es consumidora de estos productos o servicios es un colaborador necesario de las actividades ilícitas, actividades tremendamente lucrativas para las redes del crimen organizado.
La sanción no solo al que vende, sino también al que compra podría tener un importante efecto disuasorio que permitiría combatir de una manera más eficaz esta problemática.
La FEMP es consciente de esta problemática y de que la sanción al comprador es una de las herramientas para la erradicación de este fenómeno, y así lo propone en su artículo 76.3 de su Ordenanza Tipo de Seguridad y Convivencia Ciudadana de la Federación Española de Municipios y Provincias.
INTRODUCCIÓN DE NUEVAS SANCIONES A LAS INFRACCIONES
Siguiendo con nuestro razonamiento del apartado anterior, en caso de admitir nuestras observaciones, proponemos incluir dentro del apartado de infracciones leves, graves y muy graves toda infracción contra los derechos de PI, junto a su preceptiva sanción.
Desde ANDEMA, consideramos como:
- una infracción leve: la compra o adquisición, de productos infractores de la PI, en el espacio público o servicios no autorizados, procedentes de la venta ambulante no autorizada.
- una infracción grave: por la naturaleza de la propia actividad de venta ambulante no autorizada de productos infractores de la PI, entre ellos las falsificaciones, entendemos que esta acción debe ser tipificada como grave, toda vez que se ponen en peligro los derechos de los consumidores y usuarios, así como que se comete un grave riesgo contra la seguridad y la salud de los adquirientes.
- una infracción muy grave: consideramos que la venta de productos falsificados y otros productos alterados, fraudulentos o no identificados en establecimientos comerciales es una de las conductas más graves que pueden darse en el ámbito comercial, toda vez que se pone a disposición del consumidor ya no productos legales que no han pasado los correspondientes procesos de seguridad, sino productos potencialmente peligrosos que podrían generar graves daños de salud pública y personal.